Los libros de texto, Navidades, vacaciones, una avería imprevista del coche, una visita al dentista, compras a fin de mes, comuniones, bodas… Así vamos acumulando pequeñas cuotas en tarjetas de crédito y pequeños préstamos a lo largo del año, enlazando uno con otro hasta que la cuota mensual se convierte en un auténtico dolor de cabeza.

No hay economía familiar que no cuente con al menos 1 o 2 productos de créditos al consumo, que suponen una cuota media mensual de entre 200 y 300€ a devolver en un plazo corto de tiempo de entre 5 a 8 meses.

Desde luego, os aseguramos que hay situaciones mucho más complejas (y hasta dramáticas) que en Boreal Financia nuestros clientes nos trasladan a diario y, para la que hay soluciones.

Antes de nada, un pequeño apunte: hablamos de microcréditos ya que este concepto se ha popularizado a través de la publicidad, aunque originalmente las entidades financieras lo crearon como un producto para emprendedores y microempresas. Por lo tanto, sería más acertado hablar de Créditos al Consumo.

Recientemente el Banco Central Europeo (BCE) publicó los resultados sobre el crecimiento de los créditos al consumo en Europa. Y la sorpresa fue que en España en 2019 había aumentado un 14,7%, duplicando la media europea e incluso casi triplicar en comparación con Alemania, donde apenas representa un 5%, según publica el diario Expansión.

No diríamos que es tan sorprendente cuando analizamos quiénes y para qué están destinados estos microcréditos.

 

Quiénes solicitan créditos al consumo o microcréditos

Por lo general tendemos a pensar que gran parte de hogares en España no llegan a fin de mes o no cuentan con capacidad económica suficiente para hacer frente a todos los gastos del día a día. Es decir, que tenemos un hábito de «tirar de tarjeta de crédito» para pequeñas compras o gastos imprevistos.

Sin embargo, según diversas entidades financieras la realidad es otra muy diferente. Son realmente los jóvenes de entre 18 a 24 años quienes solicitan con más frecuencia estos productos financieros para pequeños gastos hasta un máximo de 800€ y, según aumenta la edad, se recurre menos a ellos, pero por mayor cuantía.

 

Para qué se solicitan microcréditos

A todos nos ha pasado ir a realizar la compra y no contar con suficiente efectivo o saldo suficiente en la cuenta. Es cuando recurrimos a la tarjeta de crédito. Sin embargo, este tipo de créditos representan una cantidad muy baja de transacciones, frente a la práctica más habitual que es la compra de vehículos nuevos o seminuevos.

Las propias marcas a través de sus concesionarios cuentan con su sección de financiación y, los bancos también se han sumado a ofrecer sus propios créditos para estos productos.

Hay otras muchas situaciones de la vida cotidiana en la que estamos utilizando estos microcréditos sin darnos cuenta. Por ejemplo, en algunas ventas a plazos de mobiliario, tecnología y compras que suelen superar los 1.000€. También en tratamientos dentales, viajes y eventos, especialmente bodas y comuniones. Por último, al final de nuestro ranking se encuentran los créditos para pequeñas reformas del hogar.

 

Por qué reunificar los créditos al consumo

Como comentábamos al inicio de este post, los pequeños créditos al consumo se van acumulando y enlazando a lo largo del año. El problema surge cuando ya existe un microcrédito de mayor cuantía como es la compra de un vehículo que puede llegar a una media de entre 240€ hasta 300€ y se le suman compras a finales de mes o algún otro imprevisto. En la mayoría de los casos se trata de acumulación de tarjetas de crédito de varias entidades a las que es fácil acceder.

Es cuando la cuota mensual empieza a ser asfixiante por encima de los 500€ y se corre el riesgo de acumular cuotas, impagos, sumado al pago de hipoteca o alquiler y gastos cotidianos. Es en ese momento cuando es fundamental buscar una solución rápida. Una «Cuesta de Enero» mes a mes puede suponer un desgaste importante y llegar a limitar nuestra capacidad para endeudarnos.

Ante todo en Boreal Financia te recomendamos calma. La desesperación no lleva a ningún lado. Intenta hacer cuentas y calcula la cuota mensual de todos los créditos incluida hipoteca, coche, tarjetas y todo este tipo de créditos al consumo. El efecto alivio con una reducción de las cuotas de más del 50% y hasta el 70% es el mejor argumento para solicitar la reunificación. A partir de ahí, trataremos de buscar la fórmula que se ajuste a tu caso y la mejor solución.